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Cambios en el organismo por el climaterio y la menopausia

Climaterio

Es un periodo de la vida de la mujer durante el proceso de envejecimiento, en el cual se pasa de la etapa reproductiva a la no reproductiva. Generalmente, ocurre en la segunda mitad de la vida y se caracteriza por la disminución de la función ovárica, seguida por una serie de ajustes endócrinos que se manifiestan de manera sucesiva por alteraciones menstruales, esterilidad y suspensión de la menstruación. Se da en las mujeres entre los 40 y 50 años de edad, puede darse desde 2 a 8 años antes de la menopausia y durar hasta 2 a 6 años después de la última menstruación.

Menopausia

Es el período que ocurre durante el climaterio y se refiere a la fecha en que la mujer menstrúa por última vez. Para aceptar que esto ha ocurrido, deben haber transcurrido por lo menos 12 meses desde la fecha del último sangrado. En esta etapa existen muchos cambios en la salud, el relacionamiento social y emocional.

Cambios hormonales

De los estrógenos, progesterona y andrógenos; aparece el síndrome climatérico, donde ocurren modificaciones en el funcionamiento del organismo y desarreglos orgánicos, siendo la mayoría de las veces consecuencia directa de la caída de la producción de estrógenos. Esta sintomatología incluye: sofocos; con calor, enrojecimiento facial y sudoración; desórdenes emocionales; cambios en el estado de ánimo, ansiedad, irritabilidad; pérdida de memoria; insomnio; baja concentración, etc.

Cambio en la distribución de la grasa corporal

La grasa se concentra a nivel abdominal como consecuencia de la disminución de la actividad de la enzima lipoproteinlipasa, responsable de la distribución de las grasas, que en las mujeres es ginoide (en las caderas) y en los varones es androide (abdominal). Durante la menopausia caen los estrógenos, disminuyendo así la actividad enzimática y haciendo que la grasa en las mujeres se ubique en la zona abdominal. Hay disminución de la masa muscular, aumento del riesgo cardiovascular, de triglicéridos y disminución del HDL (colesterol bueno).

Cambios óseos

Se produce una pérdida de talla debido al colapso de las vértebras que va ocurriendo progresivamente; también pérdida de la densidad mineral ósea, principalmente en los primeros 5 años de la menopausia, por lo que aumenta el riesgo de osteoporosis y fracturas osteoporóticas (vértebras, fémur y muñecas).

Disminución de la absorción del calcio y déficit de vitamina D

El 80% del consumo de calcio debe corresponder a lácteos y sus derivados, ya que son de mayor biodisponibilidad a nivel intestinal, para minimizar la pérdida de densidad mineral ósea. El otro 20% puede estar cubierto por verduras de hojas verdes, frutas secas, legumbres, algunas variedades de algas, semillas de amapola, sésamo, ya que contienen alto contenido en calcio, pero su biodisponibilidad es baja debido a su alto contenido en fibras, fitatos y oxalatos.