KARAI OCTUBRE
30 diciembre 2020
La leyenda del Karai Octubre tiene su origen en la cosmovisión guaraní. Ellos respetaban los ciclos de la naturaleza y a los duendes, a quienes llamaban Jarýi, es decir, eran los espíritus protectores, ya sea de una especie animal o vegetal; todo formaba parte de lo que hoy llamamos sistema para la sostenibilidad de los ecosistemas, que en este caso, es fundamental para el mantenimiento de la seguridad alimentaria.
Los guaraníes se guiaban por el calendario lunar, con la venida de los españoles y la evangelización cristiana se impuso el calendario Gregoriano, y según el mismo, aproximadamente en el mes de octubre, correspondía a la época donde terminan las reservas alimentarias y aún no está disponible la cosecha del año.
Por qué utilizar el poroto y locro
Los granos como las legumbres y el tupi morotĩ (locro) pueden conservarse por más tiempo, por lo cual se utilizan para realizar el karu guasu: el jopara; utilizando porotos, locro y agregando verduras, como el tajao (col nativa).
Actitud mental y de prevención
El hecho de que se disponga de granos para alimentarse, depende de la responsabilidad de administrar los recursos alimentarios; para ello, los guaraníes tenían un sistema de conservación de los alimentos, lo que hoy llamamos despensas; eran muy cautos al administrar con racionalidad y equidad para que no falte a nadie. Para realizar el karu guasu el 1 de octubre se tiene dos elementos: la disponibilidad de los alimentos y el sinónimo de la abundancia, la alegría de compartir los alimentos para que a nadie le falte.
Otra versión del karu guasu del 01 de octubre
Este día, las familias realizan grandes comilonas al aire libre, generalmente frente a sus casas, para demostrar al Karai Octubre que ostentan suficientes alimentos en el mes de la miseria. Si no es así, el duende persigue a los responsables del grupo familiar para castigarlos con su “guacha” o rebenque y enloquecerlos con fuertes silbidos. En ocasiones, como castigo elige hacerse invisible e introducirse en la casa de aquel que no cumplió con su orden y durante un tiempo causa un sin fín de molestias a la familia.
Para poder desprenderse del molesto duende, se dio la costumbre de “soplar el rancho”, lo que consiste en soplar con distintos elementos tres esquinas del rancho, dejando una libre para que por allí se escape asustada la miseria. Otra de las costumbres en esta época, por ejemplo, era levantarse bien temprano con un arreador en mano y pegar en todos los rincones de la casa diciendo “Terehóke Karai Octubre” (que se retire Karai Octubre de esta casa), o bien dejar comida en la puerta de las casas para que quien pasara por allí se la llevara. De ahí que, en todas las casas, cada 1 de octubre no falta el jopara bien servido. De esa forma, la conciencia de toda la familia queda tranquila por el resto del año. En cambio, aquellos que mezquinen la comida ese día, tendrán que convivir con el hambre y la miseria el resto del año.
Tipos de kumanda o porotos en el Paraguay
Por fortuna, se disponen aún de numerosas especies de legumbres como: kumanda para'i, pytã, morotĩ, sa´i, ysoperi o poroto manteca, kumanda yvyra'i o poroto palito.
Variantes del maíz que aún sobreviven
Según el tamaño de la planta: avatí karape, mirí, ava mitã.
Según las espigas: avati mi; avati puku.
Según el color de los gramos: morotĩ, puku morotĩ, avati tĩu o kamba (negro), avati para, sa’yju, pytã y mbujape.
Según su dureza: savoro o blando, tupi o duro, tupi morotĩ, tupi pytã y kavaju rái.
Es fundamental fomentar la cocina tradicional y sus costumbres, para recuperar nuestra gastronomía y, con ello, las especies que están en vías de extinción, para diversificar las recetas tradicionales contribuyendo a la seguridad y soberanía alimentaria.
Margarita Miró Ibars